Terminó el tiempo de paz y desarrollo social: ¡El imperio contraataca!

Felipe Marcano.

Durante la última década, mientras la economía norteamericana colapsó de manera catastrófica, surgieron en el mundo otras alternativas de gran significación como China e India. En nuestra América, se consolidan sistemas de intercambio regional y subregional como la Unasur, el ALBA y Petrocaribe. Estos últimos con una visión de integración diferente a la planteada por años desde los centros hegemónicos mundiales. El sólo pensar en el éxito de las políticas integracionistas planteadas desde el ALBA, con la implementación del SUCRE como moneda para el intercambio comercial entre los países que conforman la Alianza, puso a temblar a más de uno en las esferas del poder en los EE.UU. y en países aliados a políticas dirigidas desde Washington. Tras la interminable cadena, ¡una derrota más para las políticas estadounidenses no era posible!

El aparato militar-industrial y su brazo propagandístico debían actuar en defensa del poder perdido. En la historia, los Estados Unidos, durante todos los siglos han actuado o inventado alguna guerra, sobre todo cuando su economía tiene problemas. La meta, propósito de la guerra es la de motorizar al parque industrial militar, ya lo vimos en Afganistán, en Irak, Palestina, Irán y Líbano. Ni se diga de otras regiones próximas a Rusia o Corea. A las altas esferas del poder estadounidense sólo importa el dinero que puedan ganar vendiendo armas de última generación con las que terminan matando a mujeres y niños, ¡por error o como daños colaterales!

Con resultados tan desastrosos se acentuó la crisis económica que envuelve a la nación norteamericana. Hoy vuelve la mirada hacia el caribe y América Latina. Iniciando su accionar con un golpe de Estado en Honduras, a la brevedad la emprenden abierta y descaradamente contra Venezuela, Nicaragua, Ecuador y Bolivia. En las sombras preparan el golpe contra la institucionalidad de la región, principalmente en aquellos lugares donde en corto plazo se realizaran elecciones. Eso incluye Brasil y Argentina. El plan es actuar bajo el esquema implementado recientemente en Irán y desconocer cualquier resultado electoral adverso a las políticas intervencionistas y tutelares. Una vez consolidado este esquema procederán hacia otros Estados como Venezuela, Ecuador y Bolivia, según el plan Honduras. Para entonces tienen que haber logrado el control de toda la burocracia institucional nacional e internacional.

Ya lo vimos en el pasado; el control del gobierno y de la institucionalidad en países como Bolivia, Ecuador y Venezuela, le permite a los Estados Unidos administrar una significativa reserva de energía barata, el desmembramiento de la OPEP y sobre todo el regreso de las reservas internacionales de la región hacia su economía.

En lo inmediato, más que un escudo en el frente occidental, prevalece la tesis de apagar cualquier candelita por aplastamiento. Vacilar es perder la Republica. La burocracia diplomática, como en Honduras, no soluciona nada.

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Publicado en: 24/07/09 - www.aporrea.org/internacionales/a82969.html

Golpe en Honduras; ahora vienen por Obama Hussein

Felipe Marcano.

Más que una ficción, es una idea basada en una serie de coincidencias y manifestaciones entre situaciones y actores durante los sucesos de abril de 2002 en Venezuela, 28 de Junio en Honduras 2009 y toda una serie de declaraciones, desde el Vicepresidente de EE.UU., la Secretaria de Estado, la Corte Suprema, las empresas mediáticas y el sistema de inteligencia nombrado por Bush, contradictorias con lo dicho por el Presidente Obama

El caso Venezuela, mostró la fortaleza del Presidente Chávez, lo cual puso a pensar a todos aquellos que actúan en función de su derrocamiento. Cada día Chávez ha mejorado su sistema de inteligencia y contrainteligencia, estando siempre por delante de cada acción golpista, causando cierto temor en los adversarios porque saben que actuará de inmediato y sin vacilación. El golpe en Honduras mostró lo poco efectivo que resultan los organismos diplomáticos internacionales con los que tanto nos metieron miedo.

En Honduras, se corrigieron muchos de los errores cometidos en Venezuela, entre ellos el no dejar al Presidente Zelaya en el país. Claro, los golpistas de Honduras parecen estar seguros del apoyo del estamento político-industrial-militar-propagandístico de los EE.UU., a cada rato meten la pata; mintiendo o creando nuevas razones por lo sucedido. Desde el día 28 hasta la fecha son interminables las razones expuestas para el golpe. Lo insólito es decir hoy que no se explican por qué sacaron al Presidente Zelaya del país en lugar de llevarlo preso.

¡El golpe contra Obama!; la primera razón es por llamarte Hussein, la segunda por querer llevar buenas relaciones con Chávez y con Irán. Hemos visto como, por ejemplo, el vicepresidente dice al mundo que Israel puede atacar a Irán, mientras Obama tiende su mano para conversar. La Corte Suprema, nombrada por Bush, se dilata en una evaluación jurídica del golpe de estado en Honduras, Obama dice que fue un golpe. El Departamento de Estado y sus órganos de inteligencia no movieron un dedo para evitarlo a pesar de la información y su relación con los golpistas. Días atrás Obama señaló cómo era atacado desde los medios de comunicación, quienes, como siempre, tratan de tapar la verdad y no hablan del golpe, vacilan en condenarlo y reconocer a Zelaya como Presidente. En entrevista televisiva, Hillary Clinton, secretaria de estado, define todo un panorama golpista contra Obama, mientras él trata de lavar la cara de su país ante el mundo y aproximarse cordialmente a todos aquellos considerados enemigos.

Cuídate my Friend, acabando contigo, vendrán por nosotros y todo aquel que ose pensar diferente. Se acaba la esperanza de unas mejores relaciones y de mundo multipolar…

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Publicado en: 10/07/09 - www.aporrea.org/internacionales/a82054.html