Nével Marcano
Después de seis días de la caída de la primera bomba de la coalición estadounidense-inglesa-española, sobre territorio iraqui sin autorización del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, en busca de un renombrado armaneto de destrucción masiva, potencialmente utilizable para destruir a los Estados Unidos de Norteamérica, Inglaterra y España en menos de 45 minutos, nos encontramos en una gran encrucijada.
Los planes de invasión rápida se han esfumado y, a pesar de estar a un paso de entrar en las ruinas de lo que fuera la ciudad más antigua de la humanidad, no se han logrado encontrar los grandes depósitos y fabricas de tal armamento, sin embargo; sí se ha encontrado una gran resistencia, a base de zanjas llenas de petróleo, tormentas de arena y la voluntad de un pueblo que se resiste a ser invadido, aunado a ¡sofisticados equipos militares como binoculares de visión nocturna y posicionadores satelitales! comprados probablemente a industrias rusas.
¿Y qué de las armas nunca vistas e imaginadas que los mismos norteamericanos y británicos vendieron o donaron a Bagdad?...
Al igual que en los sucesos de abril de 2002, los noticieros internacionales como CNN, con eco en los medios nacionales, trasmiten información al mundo, bajo el asesoramiento del Departamento de Estado, que muestra una versión paradójica de lo que realmente sucede en Irak y en el resto del mundo con la libertad de expresión e información.
Esta parodia de guerra, montada por el Departamento de Estado a través de medios de comunicación, para derrocar a Sadan Hussein, revela fallas de inteligencia y planificación sobre la forma cómo el pueblo iraquí actuaría en apoyo al ejercito invasor. Fallas que, coindencialmente, nos traen a la memoria los sucesos del 11 de abril de 2002 y sus efectos colaterales, como la asunción al poder del empresario Pedro Carmona y el respaldo simultaneo de CNN, el Departamento de Estado y el gobierno español.
¡Qué equivocado estaban sobre lo qué realmente pasaba en Irak y pasa en Venezuela!
¡Qué desaire, de aquellos venezolanos y ciudadanos del mundo que aupan la destrucción de un pueblo para saciar sus apetitos de poder por vías no democráticas!
¡Qué decepción, de aquellos venezolanos y ciudadanos del mundo que creyeron que a través de la parodia de la guerra, en pocas horas, podían asumir el control de una Nación y auto-proclamarse Presidente, en lugar de Usurpador o Conquistador!
¡Tremendo error, de aquellos lideres regionales e internacionales que planificaron y ejecutaron toda esta parodia mediática alegando libertar a un pueblo que no quería ser liberado...¡
Un pueblo que SÓLO QUIERE VIVIR EN PAZ...
Publicado en: 27/03/03 - www.aporrea.org/actualidad/a2677.html
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